La animación es otra de las disciplinas que, por si misma, es una especialización. Podemos animar cualquier propiedad que tengamos en Blender: posición, rotación, escalado, que son las propiedades básicas de la transformación, pero también podemos animar cualquier otra propiedad como la intensidad de la luz o el color de un material. En estas lecciones vamos a ver cómo funciona la animación dentro de Blender.
La animación nos acompaña como un arte desde hace más de un siglo. Es un efecto conocido como persistencia de la visión. Este efecto ocurre cuando una serie de imágenes se proyectan a una determinada velocidad (fotogramas por segundo) dando la sensación de movimiento.
La animación tradicional siempre ha sido muy laboriosa pues requería dibujar cada fotograma con sus correspondientes cambios de un fotograma a otro.
Para hacer esta labor se requería un animador principal que era el encargado de realizar los fotogramas clave. Este animador principal solía ser el mejor y, generalmente, más veterano. Una vez realizados estos fotogramas clave, que indican posiciones importantes en la animación era necesario dibujar los fotogramas intermedios. Estos eran realizados por los animadores asistentes.
Hoy en día, con los ordenadores, estos fotogramas intermedios son calculados automáticamente en un proceso llamado interpolación.
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