Episodio 104. ¿Renderizas en PNG? ¿Todavía?

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El tema del render es crucial, y escúchame bien si eres nuevo: nunca renderices un proyecto final directamente en formatos como AVI o MOV. No lo hagas nunca en vídeo. Deberías renderizar a fotogramas, y hacerlo bien es más importante de lo que imaginas. La elección del formato adecuado puede marcar la diferencia entre un proyecto exitoso y uno que no alcanza su potencial. Yo aprendí esto de la manera difícil en uno de mis primeros proyectos, pero esa es una historia que te contaré en un momento. Primero, vamos a sumergirnos en el mundo de los formatos de archivo y a descubrir cuál es el mejor para tus necesidades de renderizado.

Así que presta atención a todo lo que te voy a contar.

Pero antes, mi nombre es Javier Vega y soy artista 3D y desarrollador web, aderezado con las dosis necesarias de marketing online para poder vivir de lo que más me gusta: el 3D y la web. Y si encima se conjuntan las dos cosas en un proyecto, eso me hace aún más feliz.

Vamos al tema de hoy. Y es un tema que creo que es importante. Si tú como freelance 3D renderizas tus proyectos en vídeo directamente, lo estás haciendo mal. Y te lo voy a explicar. Esto no es una manía de abuelo cebolleta.

Cuando renderizas un proyecto se hace fotograma a fotograma. Esto te da muchas ventajas. Una de ellas es la de poder distribuir el render entre diferentes máquinas. Esto lo haría un administrador de render en una granja de render. Esto es tema para otro episodio.

Otra ventaja es que si tienes que interrumpir tu render por algo. Y más si estás usando una sola máquina para trabajar y renderizar. Porque así podrás continuar desde donde lo habías dejado. Y fíjate tú qué importante es eso. Renderizas 60 o 70 fotogramas por la noche o en horarios que no uses el ordenador. Paras el render y vuelves a renderizar en otro momento a partir de ese fotograma.

Esto es una gran ventaja. Todavía me acuerdo de uno de mis primeros proyectos que rendericé con la experiencia de un barbilampiño zao3d. Esto es lo que suele pasar cuando aprendes a trozos. Es decir, es una gran ventaja el auto aprendizaje, el autodidacta. Es el reflejo de una gran pasión y disciplina. Pero te faltan detalles. Y a veces esos detalles te hacen cagarla. Nadie te explica como se renderiza un proyecto.

Pues eso ocurrió. Después de muchas horas. Más de un día renderizando a vídeo, un avi se va la luz. ¡Que alegría, eh!

Pues ya te imaginas lo que ocurre con un vídeo que se ha interrumpido. Simplemente no puedes seguir el render. Y hay que volver a renderizar de nuevo. Y como era un empanao de la vida volví a hacerlo en vídeo. Esta vez con más suerte porque no hubo corte de luz. Pero aún así la experiencia hizo que me apuntara esto. Te aviso. Cuando me pasó eso no había Google donde consultar. No estaba ni Google, ok? Existía un tal Altavista y navegabas con Netscape o Microsoft Explorer. Y los tutoriales y cursos en papel. Y mensualmente si eran revistas. Hasta que leí en una, y disculpa que no me acuerde de cuál, donde explicaban el proceso del render.

Y explicaban en qué formatos había que renderizar. Y ninguno era el vídeo. Todos eran renders fotograma a fotograma. Eso también ya me quedó claro cuando hice mi primer trabajo en un estudio de 3D. Pero ya llegué a ese puesto de trabajo con la lección aprendida.

Así que esa revista o libro, no recuerdo bien. me abrió los ojos. Pero fue como haber descubierto el gran secreto. Me sentía de puta madre. A partir de ese momento renderizaba en fotogramas. Y el hecho de renderizar en fotogramas hacía que te hicieras más preguntas. ¿En qué formatos guardar los renders? ¿Canales alpha? Y después seguía aprendiendo que existían los render passes y empezaba a abrirse todo un mundo de posibilidades.

La ostia.

¡Me encanta el render!

Y vienen los formatos. Parece, por lo que he visto, que se usa mucho el PNG. Y yo mismo lo he usado. Pero también te acabas dando cuenta de que no es un formato pensado precisamente para el render 3D. Le faltan cosas. Y sí, escuchas que existe el formato EXR. Y lo pruebas y ves que te genera un archivo de un tamaño monstruoso. Así que como freelance es un pequeño sustito porque empiezas a notar que necesitas comprar más discos duros para almacenar semejante tamaño de archivos.

Y dejas de usarlo. Pero otra vez vuelves a pensar. ¿Por qué en los estudios lo usan? ¿Por qué me lo piden siempre en EXR? Y volvemos a probar. Experimentar. Como ves soy un inquieto llanero solitario del 3D. Me encanta saber. No me gusta quedarme sin respuesta. Y pruebas y preguntas y buscas. La primera ventaja que te da el EXR es que te permite guardar en un alto rango dinámico de colores. Y cuando digo colores también incluyo información en coma flotante de otros datos, como el canal de profundidad, normales, etc.

Cada render pass que incluyes hace que pese más. Así que qué opciones hay. Pues está en las opciones del formato EXR. Cuando decides que vas a guardar en ese formato puedes configurar algunos parámetros. Uno de ellos y este es clave, es el Codec. Y te da varias opciones. Amigo 3dsero, cuando no sepas algo, o qué pasa si haces un cambio, lo mejor que puedes hacer es hacerlo. Se aprende mucho siendo un atrevido. No vas a romper nada. Solo romperás la barrera de tu conocimiento. Vaya frase. Pues al ir probando encontré que el codec DWAA (lossy) me da un archivo más pequeño que el PNG… Siiii, y sin pérdida de calidad. Al menos no apreciable!!

Y para visualizar estos archivos te hago una recomendación. Instala DJV. Con este reproductor podrás visualizar cualquier render que hayas hecho por fotogramas. ¿Lo has usado ya? Pues estás tardando en usarlo. Además, puedes configurar Blender para que te abra este reproductor por defecto.