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Si nos paramos a reflexionar, aunque sean 5 minutos, sobre las distracciones que tenemos a diario nos daremos cuenta de que seguramente están afectando más de lo que pensamos a nuestro rendimiento. ¿Te has parado a pensarlo? ¿sabes qué distracciones tenemos? ¿te acaba de sonar una notificación en el móvil? ¿has cambiado de pestaña en el navegador?
Impacto de las notificaciones en el rendimiento
Esto es algo que nos está afectando más de lo que imaginamos y que en mi caso he tratado de ponerle freno. Antes me molestaban menos e incluso buscaba notificaciones, pero finalmente he tenido que decidir que no quiero más interrupciones en mis momentos de trabajo. Y menos en un trabajo que supuestamente está etiquetado como artístico. Artista 3D.
La importancia de evitar interrupciones en el trabajo artístico
¿Te imaginas a Picasso siendo interrumpido cada 5 minutos? Si, imagino que lo interrumpirían en algún momento, pero estoy seguro que no era cada pocos minutos con una vibración o una notificación visible en una pantalla. Cuesta imaginar eso.
Con el tiempo me he dado cuenta de que he sido una persona que tiende a dispersarse fácilmente y te hablo de tiempos en los que no te interrumpían con notificaciones. Con una mosca volando ya estaba distraído. Pues imagina ahora.
Estrategias para minimizar distracciones
Por lo tanto, he tenido que tomar una decisión. La primera poner el teléfono en silencio durante todo el tiempo que estoy trabajando. Obviamente no voy a estar 8 horas pegado delante del ordenador trabajando. Haré algunas pausas que también me servirán pues para eso que parecía que era tan urgente que al final no lo es. Hacer una llamada o responder algún mensaje. No pasa absolutamente nada. Y es que esto es así. ¿Cuántas cosas graves, pero graves de verdad, te pasan absolutamente cada día? Verdad que ninguna. Es raro.
Productividad y la gestión de notificaciones
Y cuando pasa algo realmente grave, pues ya te enteras, por supuesto. Pero no podemos estar todos los puñeteros días en modo alarma por si esa interrupción es para algo grave o muy importante. Más importante que lo que estás haciendo justo en ese momento.
Después me di cuenta de que no solo me valía con tener el teléfono silenciado. Cada vez que recibía una notificación el teléfono vibraba. Al principio no le di mucha importancia. Pero con el tiempo acabó molestando ese ruido de vibración sobre la mesa. Así que dejé de ponerlo sobre una superficie dura como la mesa y pasó a estar encima de un cojín para que no hiciera ruido al vibrar. Al final lo más fácil fue quitar el modo vibración y punto.
Modo «No Molestar» cuando trabajas
Y desde que estoy así, en ese modo de No Molestar cuando trabajo he empezado a ser algo más productivo. Cada vez un poco más, la verdad. Y ahora he adquirido unos hábitos y disciplinas como es leer o contestar los correos siempre a la misma hora. En lugar de hacerlo a tiempo real. Así tampoco me distraen los correos. Y también te das cuenta de que en los correos hay mucho ruido, mucha cosa poca importante, mucha newsletter a la que un día te suscribiste y ahí está llenándote el buzón, pero en silencio, eso sí. Porque quité las notificaciones del navegador. ¿Te das cuenta de que en todo lugar digital en el que pones tus manos te aparece un mensajito de «Oye, quieres recibir las notificaciones?». Pues sí, hay una necesidad de que estemos distraídos todo el tiempo.
Así que lo te comento hoy, no es bien bien un consejo, aunque te lo puedes tomar como consejo, si no una reflexión que a veces debemos tomar. Vamos a relajarnos, por favor. Y si quieres ser más productivo, menos distracciones y más trabajar.
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